CDMX, 11 mayo 2022 (QUENOCALLETUCALLE.COM / LAMETROPOLI.COM.MX).- La Jefa de Gobierno no cumplió su promesa de revelar el informe de la empresa noruega DNV sobre las condiciones de la Línea 12 del Metro, como lo había prometido el martes.
Desde muy temprano, en la agenda del Gobierno de la Ciudad destacaba una conferencia de prensa con el titular de la Secretaría de Obras y Servicios, Jesús Esteva Medina, y la secretaria de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, Myriam Urzúa Venegas, el secretario de Gobierno, Martí Batres, la secretaria de Finanzas, Luz Elena González, y el secretario de Movilidad, Andrés Lajous.
La Jefa de Gobierno brilló por su ausencia. Envió a su pelotón a presentar su informe de lo que llamaron «inconsistencias y contradicciones técnicas y científicas» del Reporte de Análisis de Resultados de Causa Raíz de DNV.
La primera que tomó la palabra, fue Myriam Urzúa, quien hizo un recuento de las peticiones hechas por el gobierno local. Dijo que el 16 de junio del año pasado, se pidió un primer informe a la empresa DNV, en el que los primeros hallazgos que provocaron el accidente de la Línea 12 fueron las «inconsistencias de la construcción».
Para el 7 de septiembre, se concluye que el colapso se debió a «problemas de diseño y construcción, ausencia de pernos funcionales, soldaduras deficientes y la falta de apego a la normatividad desde el proyecto ejecutivo».
Sin embargo, la funcionaria estableció que la empresa DNV se comprometió a entregar el tercer informe el 21 de octubre, pero no se realizó. En consecuencia, se observó una serie de «inconsistencias» en dicho reporte, según la secretaria.
Para el gobierno de la ciudad, las «inconsistencias» van desde que no consideraron en su análisis información sobre el llamado ‘tramo espejo, o tramo gemelo’, un tramo de la L12 que tiene un tramo estructural idéntica al tramo colapsado, informó la funcionaria.
También se pidió que se analizará de manera más profunda el llamado error de diseño, como el error causa-raíz, pero la empresa no lo hizo, según ella.
Las llamadas «inconsistencias», se enfocan a que el gobierno de Sheinbaum se niega a aceptar que el accidente no fue provocado por la falta de mantenimiento sino desde el diseño y construcción de la Línea 12.
La realidad, como dicen algunos, es que la responsabilidad es compartida. Desde Marcelo Ebrard, Miguel Ángel Mancera y Claudia Sheinbaum, tienen una parte de responsabilidad que nadie atendió en su momento.
Para Claudia Sheinbaum y su equipo, las deficiencias en el proceso constructivo son:
- Proceso de soldadura de los pernos Nelson,
- Porosidad y falta en la unión perno-trabe,
- Falta de pernos Nelson en trabes que conforman el conjunto del puente,
- Diferentes tipos de concreto en la tableta
- Soldaduras no concluidas y/o mal ejecutadas,
- Y una supervisión y control dimensional en soldaduras de filete”.