Para 2025, los pensionados del IMSS que cotizan bajo el régimen de la Ley 73 tendrán un incremento en sus pagos mensuales, en respuesta a la inflación y a las crecientes necesidades de la población jubilada. Aunque el ajuste específico aún no ha sido anunciado, se espera que sea proporcional al aumento en el costo de vida, lo cual permitirá a los pensionados mantener su calidad de vida y hacer frente a los gastos que vienen con la edad. Este aumento es parte de los esfuerzos del IMSS para asegurar la sostenibilidad de las pensiones en un contexto económico complejo.
La Ley 73 beneficia a los trabajadores que comenzaron a cotizar antes de 1997, permitiéndoles acceder a un esquema de pensión más favorable en comparación con el modelo posterior, conocido como Ley 97. Este incremento proyectado para 2025 representa un alivio para quienes dependen de esta pensión como único sustento, ya que cubrirá parte de los aumentos en el costo de productos de primera necesidad, así como en servicios médicos y de cuidado.
Especialistas en seguridad social han destacado la importancia de estos ajustes, ya que el sistema de pensiones bajo la Ley 73 es financiado por el IMSS y respaldado por el gobierno federal, lo que garantiza su viabilidad a largo plazo. Sin embargo, advierten que es necesario revisar periódicamente los montos para asegurar que los pensionados puedan cubrir sus necesidades sin comprometer su estabilidad financiera.
El incremento también contribuye a fortalecer la economía nacional, ya que permite a los adultos mayores continuar participando en el consumo de bienes y servicios. Este movimiento económico no solo beneficia a los pensionados, sino que también genera un impacto positivo en otros sectores productivos del país, promoviendo un flujo constante de recursos en la economía mexicana.